El hombre, animal racional

La riqueza que impregna la naturaleza humana hace de ésta una realidad compleja, llena de matices. El hombre es capaz de cazar, escribir, pintar, trabajar o soñar, puede construir grandes ciudades y llegar a otros planetas; sin embargo, también es capaz de mentir, robar, asesinar. De esta manera, el ser humano se presenta como una realidad que se caracteriza por la flexibilidad para adoptar numerosos roles y por una esencia contradictoria, que le permite adaptarse a situaciones muy distintas sin por ello dejar de ser hombre. En el seno de esta complejidad es necesario encontrar algún elemento que explique todas estas potencialidades y que esclarezca a su vez el origen de su actividad, que sea específicamente humano y lo distinga de todos los demás seres que pueblan el mundo. Se ha demostrado que muchos otros animales son capaces de jugar o de trabajar en sociedad para adaptarse al entorno, y que hay incluso algunos que emplean algo semejante al lenguaje: ¿qué es entonces lo que...